BILBAO

Prosiguiendo mi viaje, llegamos hasta BILBAO, no sin antes haber pasado por algún pueblo de los alrededores para poder visitar una maravilla de la Naturaleza, el estuario de Urdaibai, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO.

Por supuesto, en esta ciudad, además de visitar varios de sus monumentos, como la Basílica de Nuestra Señora de Begoña, y otros más, además de su Catedral en pleno centro histórico, no podía faltar, lo que los bilbaínos llaman, "La Catedral", que no es otra, que el famoso Estadio del Athletic de Bilbao, "San Mamés", que sin duda, es uno de los campos de fútbol más viejos de nuestro país sino el que más, al menos en activo.

Por supuesto, tampoco podíamos salir de allí sin probar, su deliciosa gastronomía, y su famoso bacalao, que en este caso, fué al pil- pil, exquisito por cierto.

Paseamos a orillas de la ría durante un largo paseo y pudimos contemplar el famoso Museo Guggenheim, que en esta ocasión, se quedó simplemente en una visita externa, confiemos en que en otra visita, más tranquila podamos verlo con más calma y visitar su interior.

De todas formas, fue una ciudad que me gustó muchísimo y que confío en poder volver a visitar de forma más tranquila más adelante.

Aquí os dejo algunas fotos.